Estos pequeños rollitos están riquísimos, y son un perfecto acompañamiento estas tardes de verano, con un fresquito té de hierbabuena o un buen Earl Grey. Además, estos rollitos de vino blanco son muy rápidos de elaborar, porque acostumbrado a los tiempos de espera de panes, cocas y pizzas… son amasar y al horno. Por eso, lo primero que tendrás que hacer es precalentar el horno a 150º, para que cuando termines de amasar los rollitos de vino blanco, puedas hornearlos.

Ingredientes
1 vaso de aceite de oliva suave
1/2 vaso de vino blanco semidulce
550 grs. de harina
2 cucharadas de azúcar
azúcar glass para espolvorear
1 sobre doble de gaseosa (azul y blanco)

Elaboración
Precalienta el horno a 150º, con calor arriba y abajo.

Disuelve el azúcar y la gaseosa en la harina.

Calienta el aceite en el microondas durante 30 segundos y échalo sobre la harina. Remuévelo bien y a continuación incorpora el vino blanco en frío.

Mézclalo todo y forma los rollitos directamente sobre la placa del horno.
TRUCO: Para darles la forma de rollito, haz una bolita pequeña de masa y colócala sobre la placa del horno, después hinca el dedo en el centro de la bolita para formar el agujero.

En unos 20 minutos a 150º estarán hornados, nos los dejes más tiempo porque no llegarán a dorarse, y por contra, quedarán demasiado secos. Cuando estén listos, sácalos del horno, rebózalos generosamente con azúcar glass y déjalos enfriar sobre una bandeja. Cuando estén fríos, los podrás guardar en tu recipiente favorito.

Y ya tienes listos para disfrutar y ofrecer a tus amigos, unos ricos rollitos de vino blanco.